¿Más empleo o más precariedad? La otra cara del crecimiento laboral en España
Queremos hablar de un tema que está en boca de todos: la economía y el empleo en España. Aunque parece que las cifras están mejorando, la realidad que muchos vivimos es muy diferente.
Más empleo, pero también más precariedad
En la primera semana de junio, justo antes de las elecciones europeas, nos encontramos con dos noticias que pintan un cuadro bastante claro de lo que está pasando en nuestro país. Por un lado, el Ministerio de Trabajo que anunció en mayo se crearon 220.000 nuevos empleos, principalmente gracias al turismo. ¡Genial! Pero espera, hay más.
La otra cara del empleo
Resulta que casi la mitad de los españoles llega justa a fin de mes, según un informe de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza. Así que, aunque hay más empleo, muchos siguen lidiando con la precariedad y los bajos salarios.
Datos que no podemos ignorar
- 220.000 nuevos empleos en mayo: Superan el promedio de los últimos diez años, sin contar el 2020.
- 21,3 millones de trabajadores afiliados a la Seguridad Social: ¡Récord histórico!
- Paro baja en casi 60 mil personas: Hasta los 2,6 millones, la cifra más baja desde 2008.
- Tasa de paro del 11,7%: Aún muy alta comparada con la media europea del 5,9%.
- Paro juvenil del 27,4%: La más alta de la UE.
Precariedad y bajos salarios
El turismo y la hostelería, responsables de gran parte del nuevo empleo, son sectores conocidos por su precariedad y bajos salarios. De hecho, el poder adquisitivo de los salarios ha caído un 3,6% en los últimos tres años. Y aunque el 43% de los contratos firmados el mes pasado fueron indefinidos, muchos son a tiempo parcial o fijos discontinuos.
Paro estructural y larga duración
A pesar de los buenos números, el paro estructural sigue siendo un problema serio. 4 de cada 10 desempleados llevan más de un año en paro, y 1 de cada 4 buscan trabajo desde hace más de 2 años.
¿Qué podemos hacer?
Según expertos como Miguel Basterra, necesitamos una intervención en el modelo económico que apueste por la reindustrialización. Esto podría ser la clave para crear empleo de calidad, estable y con salarios dignos.